Hablamos de…Educación y Cultura y su papel para generar sociedades más igualitarias y democráticas
El papel de la educación y de la cultura es clave para generar sociedades más igualitarias y democráticas donde la ciudadanía pueda ver satisfechas sus necesidades de aprendizaje, formación, ampliación de conocimientos y estudio, así como garantizado el derecho a recibir una educación integral, de calidad y que atienda las particularidades y características de todas las personas en todas sus fases vitales. Igualmente, poder acceder a una oferta cultural diversa, amplia, que genere interés y atracción y quede distribuida de forma igualitaria en el territorio es un aliciente para generar comunidades más conectadas, resilientes y abiertas hacia el mundo y lo que ocurre en él. Incluso, supone una estrategia para revitalizar lugares y establecer relaciones entre actores y agentes que, sin los condicionantes adecuados, viven de espaldas entre sí en su día a día.
En este sentido, la educación y la cultura son clave para el desarrollo sostenible de los entornos habitados, tanto en áreas rurales como en áreas urbanas.
Cuando se adoptó la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, la comunidad internacional reconoció que la educación es esencial para el éxito de sus 17 objetivos, incluso habiendo de explicitar su relevancia señalando uno de ellos de forma exclusiva a la consideración del papel de la educación. El Objetivo Desarrollo Sostenible número 4 tiene como fin último “garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos”.
El próximo año 2030 se marca como un hito para el alcance de metas que han sido dispuestas y consensuadas por la Asamblea de las Naciones Unidas, y su logro no compete única y exclusivamente a aquellos países y regiones que se encuentran en puntos de partida más desfavorables, en este caso aquellos con sistemas educativos más débiles y una menor tasa de escolarización y alfabetización. Sino a todos y cada uno de ellos ya que el ODS 4 puede tener lecturas amplias y complejas según el contexto territorial. En el caso de territorios considerados como desarrollados en términos socioeconómicos, resulta imprescindible continuar con los esfuerzos iniciados décadas atrás para asegurar que todas las niñas y niños terminen la enseñanza primaria y secundaria, que ha de ser gratuita, equitativa y de calidad y producir resultados de aprendizaje pertinentes y efectivos que permitan activar los oportunos sistemas de crecimiento personal, laboral y económico. Es decir, es necesario no bajar la guardia y seguir primando las tareas de innovación y actualización de los modelos educativos para atender a las nuevas demandas sociales y culturales sin dejar a nadie atrás. Además, más allá de la necesaria modernización de los sistemas asistenciales en los centros educativos, también resulta oportuno ampliarlos e incluir en la operativa habitual una mayor y mejor consideración de la amplia variedad de sensibilidades y atributos del alumnado que influyen en su aprendizaje y en su relación y comunicación entre el mismo.
No obstante, y pese a defender esta visión territorializada de la educación, e indirectamente de los servicios culturales, el valor primario del objetivo es universal. Es decir, son desafíos para lograr la educación universal de todas las personas a partir del agregado de resultados exitosos en diferentes partes del mundo.
Cabe destacar, por tanto, que, sin una educación de calidad, inclusiva y equitativa para todo el mundo y con oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida, los países no lograrán alcanzar la igualdad de género ni romper el ciclo de pobreza que deja rezagados a millones de niños, jóvenes y adultos. Y este escenario, en diferentes contextos y grados de alcance, afecta a todas las regiones y sociedades. Incluso, más allá de la igualdad de género, este factor es importante para el desarrollo sostenible, la promoción de la cultural de la paz, la generación de instituciones sólidas y justas mediante la contribución de personas formadas e instruidas en el bien común, la valoración de la diversidad cultural, los estilos de vida saludables y, especialmente, la defensa de los derechos humanos.
De igual forma, y tal y como contribuyó la UNESCO en los trabajos de definición del sistema de los ODS con anterioridad a 2015, la cultura puede considerarse como una parte imprescindible de nuestro ser y configura nuestra identidad. Sin ella, no hay desarrollo sostenible, y sin una accesibilidad plena no se garantiza el crecimiento personal en igualdad de condiciones.
La UNESCO garantiza que el papel de la cultura se tenga en cuenta en la mayoría de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), incluidos aquellos que se centran en la educación de calidad, las ciudades sostenibles, el medio ambiente, el crecimiento económico, las pautas de consumo y producción sostenibles, las sociedades inclusivas y pacíficas, la igualdad entre géneros y la seguridad alimentaria.
Así, desde el patrimonio cultural hasta las industrias culturales creativas, pasando por los sistemas públicos de aprendizaje, potenciación y formación sobre y para la cultura, se trata de un ámbito facilitador de las dimensiones económica, social y ambiental del desarrollo sostenible. Y esta implicación arrastra al papel de los gobiernos locales, aquellos más cercanos a la realidad ciudadana y quienes deben aterrizar políticas trasnacionales de forma efectiva y fehaciente.
Por tanto, y respondiendo a la cuestión de si la cultura y la educación guardan un potencial importante para garantizar el desarrollo sostenible de los territorios y de las sociedades para que estas últimas aspiren a modelos más igualitarios y democráticos, se puede considerar el papel de las mismas durante los confinamientos poblacionales acaecidos por motivos sanitarios durante la pandemia de la COVID-19. Durante los sucesivos confinamientos individuales y comunitarios, el acceso digital a contenidos y espectáculos culturales permitió la participación social y contribuyó a la salud mental y al bienestar de las personas, por un lado, y el rápido diseño e innovación de herramientas tecnológicas para garantizar el acceso a la educación de las personas aseguró la continuidad de su formación y aprendizaje mientras buena parte del mundo se encontraba paralizado, por otro lado. De este modo, cuando buena parte de los parámetros que rodean nuestras vidas se trastocaban por un evento de la magnitud de la COVID-19, la cultura y la educación, de la mano en buena parte de las entidades locales de todo el mundo y organismos dependientes, se activaban como vías para mantener cierta normalidad, acercar intereses y proyectar certezas.
Nuestra Agenda Urbana
La Agenda Urbana de Aranda, tal como se ha venido explicando en las últimas comunicaciones de meses anteriores, en la fase de definición, cocreación y priorización de actuaciones concretas en su Plan de Acción, introdujo de forma coordinada y sostenida proyectos de implementación en el territorio de cada uno de los 10 Objetivos Estratégicos propuestos por la Agenda Urbana Española, y consecuentemente de sus 30 Objetivos Específicos, destacando el elevado número de aquellos concernientes al OE número 7 que mantiene como fin el de Impulsar y favorecer la economía urbana.
En total, 8 acciones configuran el Objetivo 7 de la Agenda arandina, siendo aquellas que mayor atención por parte los grupos tecnopolíticos recibieron la 7.1 de Aranda de Duero ciudad de da formación profesional y el 6.2, del Plan de Sostenibilidad Turística, siendo el área responsable, en el primero de los casos, la de Cultura, Educación, Juventud, Festejos y Hermanamientos, Acción Social, Mujer, Salud e Igualdad de Oportunidades, mientras que en el segundo es el Departamento de Desarrollo Económico, Turismo, Innovación y Comercio.
Así, los beneficiados directos son el conjunto de la juventud y el estudiantado arandino independientemente de su edad y el sector turístico, respectivamente, pero también la ciudadanía en general al ver potenciada la estructura económica y productiva local mediante futuras sinergias formativas y sectoriales para hacer de Aranda un lugar más dinámico, sostenible, competitivo, inteligente y emprendedor.
Durante el lunes 27 y el martes 28 de marzo aconteció la Feria de FP en la localidad, siendo el Proyecto Estratégico de Aranda de Duero ciudad de da formación profesional un componente vinculado estrechamente a este evento.
Este proyecto parte desde un posicionamiento donde los agentes implicados de facto son los Institutos de Educación Superior y el Sector empresarial de la ciudad. Su introducción en el Plan de Acción de Aranda se debe a que el municipio tiene el potencial de convertirse en ciudad referente de la Formación Profesional.
Para ello, se dará especial empuje a la formación profesional mediante el fomento del emprendimiento, cooperativismo y co-creación. Se comenzará por la realización de un estudio pormenorizado de la demanda y necesidades de los perfiles de trabajadores necesitados en Aranda de Duero y, en general y superando el límite administrativo local, en la Ribera del Duero, siguiendo por la reordenación de la oferta formativa para poder dar una respuesta adecuada a la demanda del alumnado y del sector empresarial.
Más adelante, se trabajará en la creación del Urban Living Lab: La ciudad como aprendizaje, por el que se busca acentuar la colaboración entre los centros formativos de todos los niveles y el Ayuntamiento, aprovechar las oportunidades de creación de nuevos ciclos formativos relacionados con proyectos creativos e innovadores a realizar en el municipio que pueda favorecer el aumento del flujo estudiantil y la creación de nuevas oportunidades asociadas a nuevos sectores emergentes y, por último, favorecer y potenciar la generación de laboratorios I+D+i de las diferentes áreas formativas. Con una perspectiva de cumplimiento para antes del año 2026, se busca licitar, como cuarta actuación dentro de este proyecto, la apertura del albergue juvenil habilitando zonas de residencia de estudiantes.
Actualidad de Aranda
Hace escasas semanas, Aranda llevó a cabo un intenso proceso de debate ente actores y agentes del municipio considerados como clave para la formulación del Plan de Participación Ciudadana. Se trata de uno de los 12 Proyectos Estratégicos diseñados en el Plan de Acción de Agenda Urbana del total de 58 Proyectos que se establecieron meses atrás. Estos, fueron establecidos mediante participación directa del Grupo Cívico, la Feria de Empleo, el Consejo Asesor Económico y Social y los Grupos Internos de Trabajo.
La intención del Plan de Participación Ciudadana es la de dar respuesta a la necesidad identificada de incrementar las oportunidades de participación ciudadana, sobre todo en la toma de decisiones. Incluye las fases de identificación de actores y perfiles clave de la sociedad arandina, el desarrollo del proceso de empatía con cada uno de ellos para comprender necesidades, frustraciones y oportunidades, el desarrollo de una metodología de participación adaptada a cada uno de los perfiles identificados, la elaboración del Manual de Participación Ciudadana de Aranda de Duero, que incluirá las metodologías, canales y herramientas específicas para fomentar la participación en las distintas etapas de formulación de políticas municipales y la elaboración del Reglamento de Participación Ciudadana, en este orden.
Durante los días 27 y 28 de febrero, se procedió a realizar un taller intensivo de co-diseño del Plan de Participación Ciudadana de Aranda de Duero, buscando obtener un borrador del Plan de Participación y formar al equipo municipal en técnicas de participación. Durante 4 sesiones llevadas a cabo en los dos días de duración del evento, se tomaron en consideración mecanismos para generar procesos donde la ciudadanía sea dispuesta como sujeto protagonista, la mejora de los canales comunicativos, la integración de esta iniciativa con la estructura habitual del consistorio para garantizar su continuidad a largo plazo y casos de buenas prácticas en múltiples contextos y escenarios.
Así, la activación del Plan de Participación Ciudadana supone el despegue de la gobernanza de la Agenda Urbana de Aranda de Duero para el despliegue de los Proyectos de su Plan de Acción. Es decir, la constatación de su cumplimiento.
Aranda te escucha
Al inicio del proceso de elaboración de la Agenda Urbana de Aranda de Duero, el Ayuntamiento puso a disposición de su ciudadanía una dirección de correo: agendaurbana@arandadeduero.es. ¡Escríbenos si tienes cualquier consulta o aportación puntual sobre nuestra Agenda Urbana, una visión compartida de ciudad!
También podrás contribuir de manera trimestral con las consultas ciudadanas.
